El pasado domingo acudí a Puertollano (Ciudad Real) a disputar una media maratón más con la idea de disfrutar igual que lo hice el año pasado. Era mi cuarta participación aquí en una media maratón que me gusta por el perfil llano y con algunas cuestas.
A la llegada me enteré que el recorrido lo habían cambiado teóricamente más llano para favorecer a los corredores pero yo creo que no era tan llano y vi demasiado curveo que te hacía perder un poco el norte.
Otra cosa que no me gustó nada fue las continuas faltas de respeto de corredores al recorrido recortando en numerosas calles por aceras. Mientras ellos atrochaban yo seguía mi recorrido por la calle y la verdad me sentí tan mal pero con la conciencia muy tranquila. Uno de los corredores se cruzó casi dejándome caer y tuve que poner la mano en una farola sino me la tragaba.
Pero bueno esto es lo de menos, el caso es que intentaba hacer una gran carrera pero a eso del km 5 noté un ligero pinchacito al que no di importancia pero por el km 7 ya tuve que parar a estirar y en ese transcurso empezaban adelantarme muchos corredores, de ir en las primeras 15 posiciones a perder demasiadas aunque esto es lo de menos, ya mi cabeza se fue de la carrera aunque me di una última oportunidad de reengancharme y poder seguir para terminar.
Proseguí mi camino intentando engancharme a uno de tantos corredores que me pasaban pero nada, el dolor en el isquio me daba guerra y ya fui trotando hasta la llegada al coche y allí ya puse fin a mi carrera.
En el momento sentí que era lo mejor pero tras quedarme en frio os aseguro que me dolía más el echo de abandonar que el propio dolor en sí. Es una carrera que me hacía mucha ilusión pero a veces las cosas no salen como esperas. Tras pasar una tarde jodida descansando, el lunes mucho mejor, martes mejor aún y ya sin dolor alguno. Ahora espero poder seguir trabajando bien y tener un poco más de suerte con los dolores y las lesiones, siento que me ha mirado un tuerto.
Lo mejor del día es la cantidad de gente que se alegró de verme, esas charlas con los corredores antes de la carrera llenan mucho. También me encontré con Ramón y Francisco, dos grandes colegas toledanos que sin esperarlo nos encontramos allí. También agradezco a los corredores que tras pararme me animaban mencionando mi nombre así como a ese chico que al verme parado se interesó por mí, me preguntó que como era ese dolor y me deseó una pronta recuperación.
Hay detalles que valen mucho, que llenan y te hacen sentir valorado. Sin duda me llevo un gran recuerdo pues ya no me acuerdo del dolor ni del abandono, creo que ese cariño de la gente y el saber parar a tiempo fue lo mejor del día.
Ahora queda seguir entrenando para seguir mi camino Road to Valencia, próxima parada media maratón de Ciudad Real el próximo 20 de Octubre.
Sigue tu ritmo y llegarás a tu meta. El blog de tek0
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