Durante la semana uno piensa siempre en como puede afrontar una competición, lo que puede vivir y siempre pienso y vivo lo mismo. La realidad supera a tus mejores sueños y así es como lo puedo decir.
Voy a intentar haceros llegar todo lo que viví sin perder ningún detalle porque quiero que las personas que me apreciais, me quereis o me seguís seais partícipes de uno de los días más bonitos que he vivido en la vida y seguro que junto a la experiencia de Vitoria en los 42 kms de 2018 donde quedé 7º clasificado este ha sido un día así de grande, bonito y mágico.
A eso de las 19,45 horas quedo con el equipo para hacernos una foto en grupo en el Pabellón del Salto del Caballo y ya pues voy junto con Borja camino a la zona de salida.
Allí me espera David Magán al que tengo que dar el dorsal y no encontraba. Fueron momentos de angustia pues cada vez quedaba menos para salir, sin calentar, con un dorsal en la mano y mi bolsa para cambiarme. Ni lo encontraba a él, ni encontraba a Mario y Sergio para dejarles la bolsa mía. La verdad que ahora me río pero en ese momento pufff que angustia jajaja.
Y sí, les encontré y primero una foto jaja. Pero no estaba el cuerpo como para ello ya que pensaba en tirar la bolsa y empezar a calentar algo jeje. Una vez encontrados todos me pongo a trotar un poco entre tantos corredores. A mí me gusta calentar en solitario, sin gente pero ese día fue muy difícil porque no paraba de aparecer gente y gente que venía a saludarte.
Así de bonita estaba la zona de salida. Yo me situé en el primer cajón. La verdad es que me veía ahí rodeado de tantos atletas buenos, con marcas tremendas que pensaba y yo que pinto aquí pero bueno yo estaba ahí y que bonito ver a tantos corredores y gente que hacía mucho no veía y todos venían con una sonrisa y ganas de hablarte un ratito.
Con actuación musical incluida y un minuto de silencio en recuerdo de mi paisana Teresa Escobar que este pasado verano nos dejó todo estaba preparado para comenzar esta gran noche de atletismo donde las emociones iban a superar a todo lo pensado y soñado en los momentos previos a la carrera.
En primera fila, a la izquierda ahí me encontraba con la equipación de Grupo Pedro Vega con muchas ganas de correr, de disfrutar y de sufrir lo menos posible por esas cuestas de la ciudad imperial.
A la cuenta de 10 comienza la carrera y allí intentaba ponerme lo más delante posible siempre dentro de mis ritmos. Pronto enlazaba con Anvi y un poco más adelante estaba Matute. En ese momento mi cabeza se fue a Vitoria donde junto a Anvi corrimos esa maratón en 2018 donde fuimos juntos de principio a fin con un 6º y 7º puesto en la clasificación y un tiempo de 2 horas 44´de ilusiones, de sueños y de mucho trabajo, esfuerzo y superación.
Pronto volvía a la tierra y ahí nos aproximamos a la primera cuesta de la noche. Ahí ya veo que las piernas funcionan en llano pero en subida también muy bien y ya empiezo a pensar que puede ser una gran noche aunque había que ir paso a paso pues Toledo es muy traicionero en ese sentido y había que tener mucho cuidado.
Tras la primera subida llegamos a la puerta del Sol. En esa bajada acelero y gano muchas posiciones. Pasamos la puerta de Bisagra y llegamos al Paseo de la Vega donde está lleno de gente, donde los tambores de la batukada se mezclan con las zancadas de los corredores y los corazones empiezan a revolucionarse con el ruido de la música y los ánimos de la gente. Llegamos a la plaza de toros y ahí mi paisano y amigo Arsenio ´´ el super´´ se encuentra de voluntario y a mi paso no para de animarme.
Al paso por el ruedo de la plaza de toros empiezo a animar a la gente que había en grada como a los corredores de la carrera de 5 kms. Estos empiezan aplaudir, animar y pufff que bonito fue ese paso. Como bonito fue volver al paseo de la Vega por el otro carril y no dejar de escuchar ánimos al grito de teko vamos, que vas muy bien. Reconozco la voz de Mario, compañero de equipo y el resto ni idea pero me llenaban de fuerza. Ahora después vamos hacia el puente San Martín. Ahí me adelantan muchos corredores pero no me puse nervioso ni mucho menos. La verdad es que estaba haciendo una gran carrera y como dije a Pleite en ese grupo donde me metí y el iba tirando que ahora aquí es donde empieza la carrera.
A partir de aquí no paran de venir cuestas, unas conocidas y ya otras menos para pasar por zonas que ni conocía ni me imaginaba que fueran así pero eran duras, empedradas y llenas de gente.
Llevaba buen ritmo aunque la verdad es que también se notaba el esfuerzo,el cansancio, las cuestas y un poco la mezcla de todo. A falta de unos 3 kms uno de los chavales del grupo que iba muy bien de pronto se queda fuera del grupo. Yo le miro y veo que se queda, bajo mi zancada y le animo a que se una a mí. Venga vamos que vas muy bien le dije. El chaval me dijo que iba un poco mal. El no era de por aquí pues su acento andaluz así me lo decía jeje. Le dije tranquilo y vente conmigo que no te vas a llevar un mal recuerdo de este día. Fuimos juntos, le iba animando, iba alentando a la gente que estaba animando la carrera y esta respondía. Venga chaval que vas muy bien, ahora giro a la izquierda, que viene una subida cuidao y hasta que ya le dije que ya ni se por donde voy y en medio de la tormenta nos echamos unas risas.
Ese último km era una cuesta abajo y luego un falso llano. El chaval se me fue un poco adelante, me adelanta Mariano de la escuela de atletismo de Orgaz y ya últimos 50 m para la línea de meta.
Escucho al speaker de la carrera Victor Hugo Ramos narrando mi entrada en meta, diciéndome unas palabras muy bonitas y yo entro con rabia, lleno de emoción porque hice una gran carrera, porque lo he pasado mal, porque he vivido muchos días duros y tristes y porque estaba viviendo uno de los días más bonitos en este deporte.
Al llegar me reencuentro con el chaval al que ayudé. Me da un abrazo y me dijo unas palabras muy bonitas llenas de emoción dándome las gracias por ayudarlo y tirar de él hasta el final. Entre emoción recuerdo que le dije.. este es mi atletismo.
Al reencontrarme con mis amigos me dicen que David Magán se aupa con el primer puesto de la carrera asique ya para cerrar bien la noche otra gran noticia.
Antes de terminar esta crónica quiero aupar en lo más alto a 2 campeones como son Lucas y a Samuel.
Lucas vivió seguro una experiencia increible en esta nocturna. Lucas corrió en una silla de ruedas adaptada en la que mi entrenador Pedro Vega junto a muchos compañer@s de equipo fueron acompañando y ayudando para que todo fuera bien y sobre todo para que Lucas lo disfrutara como cualquiera de nosotros hicimos y seguro que mis compañer@s hicieron igual. Es muy emocionante veros disfrutar, ayudar y hacer disfrutar a Lucas. Esta imagen lo dice todo. Es ver a cada uno de vosotros y me emociona. Orgulloso de cada uno de vosotros y por lucir estos colores rojinegro llenos de valores y sueños echos realidad.
Y el otro gran protagonista fue Samuel Redondo. Este joven atleta de Cobeja el año pasado al poco de comenzar la carrera sufrió un infarto. Este año tal y como ha dicho en prensa tenía que acabar lo que empezó el año pasado y lo hizo emocionado.
La vedad es que al escribir esta crónica he vuelto a ese sábado noche y ya para cerrar quiero agradecer a toda la gente que me animó. No hubo una calle que no gritara mi nombre, que no dijera vamos teko, que no me dijera algo bonito. No os imagináis la fuerza que me dio en ese momento y la que me da. Yo no soy nadie, no soy un corredor que gane carreras pero entreno y vivo cada momento al máximo sea en cualquier ámbito de mi día a día.
Y ya si que sí os quiero anunciar algo y es que después de 4 años volveré a entrenar y competir una media maratón. Será el 28 de enero en Sevilla y aunque he de reconocer que no tenía pensado aún volver a esta distancia el ánimo de David Magán, la ilusión de Iván al decirle que iba a ir y querer o intentar hacerla a su lado ha sido un plus para él y una ilusión gigante para mí. Hace unos días a golpe de inspiración, pensando en bonito nació otro lema que voy a seguir al pie de la letra y es... ¡¡ cabeza fuerte, corazón a tope¡¡.
Asique toca entrenar duro para esos 21,097 m de Sevilla. Gracias a todas las personas por hacerme vivir lo que viví este pasado sábado y por darme esta fuerza, este cariño que donde voy recibo. Ya nada me para y vamos todos juntos a luchar contra todo lo que se ponga por delante con ilusión, con humildad, con respeto pero ya sin miedos.
El blog de teko. Sigue tu ritmo y llegarás a tu meta. Cabeza fuerte, corazón a tope.
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